La industria del agro se encuentra en constante transformación. Es difícil predecir su futuro frente a los cambios bruscos que se avecinan en los sistemas productivos, demanda de alimentos, energía que mueven las máquinas (más eficiencia y mayores controles de emisiones), cambio y variabilidad climática muy preocupantes, tendencia de demanda a máquinas con más capacidad de trabajo en menos horas, livianas para evitar agresiones al suelo (traslados con menos presión específica, nuevos neumáticos y bandas de caucho y acero), materiales constructivos livianos y resistentes (aleaciones y biomaterial, bioplásticos y fibras vegetales).
Por otra parte, lo más revolucionario se encuentra en la electrónica, software, comunicaciones y conectividad, robotización. Revolucionarios sensores son capaces de identificar objetos, plantas, estado de humedad y nutricional de suelo (microvariabilidad de suelo y cultivo), variables climáticas como humedad relativa, temperatura, velocidad del viento, lluvia, evapotranspiración actual y potencial, etcétera, escanear grano y detectar daño mecánico, impurezas, contenido de aceite y proteína sobre una cosechadora.
También sensores capaces de detectar el estado nutricional de un cultivo y/o la presencia de malezas, sensores de torque en órganos importantes de las máquinas, sensores en sembradoras (caída de semilla a centímetros del suelo), sensores que ayudan a la autoregulación de las sembradoras (uniformidad de profundidad), sensores que guían una máquina entre líneas de cultivos, sensores que detectan hormonas que guían cosechadoras de frutas para sólo recoger la fruta madura, sensores de madurez de fruta, sensores de biomasa, sensores de insectos en grano almacenados, sensores de CO2 con varias aplicaciones, sensores remotos colocados en drones, satélites de alta resolución espacial, temporal, nanosatélites, inteligencia artificial, visión artificial.
Cuando se trata de producir caña de azúcar, maíz o cualquier otro insumo para transformarlo en energía, la tecnología de TOTVS está presente. Su sistema atiende al sector de bioenergía, desde la producción de materia prima hasta su transformación industrial, esto permite que conozcas con precisión los costos de la operación y aumentes la rentabilidad.
Además de las necesidades relacionadas con el cultivo en sí, la solución para bioenergía atiende las rutinas de negocios dirigidas a logística de transporte de materia prima, mantenimiento automotor, mantenimiento industrial y gestión del proceso de producción. A su vez, ofrece todo lo que su operación necesita para diseñar las mejores estrategias: dimensionamiento de actividades y recursos, planificación agrícola en mapas con rotación de cultivos, variedades y paquetes de insumos que alimentan el presupuesto agrícola.
De esta forma brinda una tecnología completa para el agronegocio: gestión agrícola de punta a punta que permite reducción de costos y señalamiento de la información offline, que ayuda al productor en la administración agrícola.
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