La productividad agrícola es esencial por muchas razones. Proporcionar más alimentos y aumentar la productividad afecta el crecimiento del mercado agrícola, el mercado laboral y los ingresos de muchas familias.
Pero, ¿de qué se trata este concepto?
El aumento de la productividad agrícola se refiere a una distribución más eficiente de los recursos. Aprender a mejorar la producción es un aspecto crucial de la agricultura productiva.
Los nuevos métodos y técnicas han brindado a los agricultores la oportunidad de aumentar la producción y mantener la sustentabilidad a largo plazo de sus fincas.
Hoy, movimientos como la Agricultura 5.0, las tecnologías verdes y las buenas prácticas de gestión rural ya están transformando los agronegocios.
Sin embargo, hay mucho que explorar sobre este tema, y en este contenido profundizaremos en el concepto de productividad agrícola.
¿Qué tal entender qué es, cómo funciona, qué tan importante es y por qué invertir? ¡Compruébalo en nuestra guía completa!
¿Qué es la productividad agrícola?
La productividad agrícola es la relación entre la producción rural y los insumos utilizados en el proceso específico de la agricultura.
Para que un agricultor mida su productividad, debe considerar el valor de la producción final y compararlo con el valor final de los insumos, la mano de obra o incluso el tamaño de la tierra utilizada en la agricultura.
Pasando a una explicación más conceptual, podemos definir la productividad agrícola como un indicador que mide la proporción de productos agrícolas (por ejemplo, toneladas de cultivos o el número de animales) a los insumos que se han invertido (dinero, mano de obra o agua).
De esta forma, es posible comprender uno de los aspectos que definen el desempeño de una finca o empresa agrícola.
Hablar de productividad no es algo sencillo, como lo es la búsqueda de un mejor resultado en los procesos administrativos.
Si bien el aumento de la productividad agrícola es fundamental para el conjunto de la población, es necesario diseñarlo con cuidado, ya que es necesario para garantizar la estabilidad y sostenibilidad ambiental.
¿Cómo funciona la productividad agrícola?
La productividad agrícola funciona como un indicador útil para comprender el desempeño de una agroindustria. Permitiendo a los gestores conocer en profundidad si sus estrategias son las más adecuadas, así como si las inversiones están compensando los costes y dando los resultados esperados.
Sin embargo, preocuparse por la productividad agrícola es también una cuestión de asegurar la calidad de lo que se produce.
En otras palabras, aliado a la estrategia de productividad, es necesario pensar formas de enfrentar las plagas e infestaciones agrícolas, así como conciliar los desafíos comunes de la rutina agrícola –como el precio de los insumos– con una operación estable.
Hoy, sin embargo, la productividad agrícola funciona en función del nivel de tecnología que emplea una finca en su día a día.
Hablamos, por supuesto, de equipos, como máquinas automatizadas, pero de mucho más, como: sistemas PIMS, que modernizan la gestión de las plantas de fabricación, así como el uso de bioenergía para alimentar granjas y reducir los costos de energía.
¿Cuál es la diferencia entre producción y productividad agrícola?
Cuando hablamos de productividad agrícola, es interesante profundizar un poco más en el concepto y explicar la diferencia con “producción”, ya que no son lo mismo.
Pero este no es un tema exclusivo de la agricultura, sino de todos los mercados en sí.
La producción tiene en cuenta el total producido, independientemente de varios factores como la tierra, el trabajo y el capital. Es un concepto que abarca todo tipo de actividades encaminadas a la producción.
La productividad, por otro lado, es el aspecto que indica cómo una finca, o una empresa, en general, ha alcanzado el nivel de producción reportado.
Es decir, representa la relación entre lo producido y los recursos utilizados.
Hablamos de qué prácticas se adoptaron, qué estrategia se elaboró, qué inversión, uso del suelo, nivel y cantidad de mano de obra, así como el tiempo que se tardó en alcanzar un cierto nivel de adopción.
¿Qué factores pueden afectar la productividad agrícola?
Para que el agricultor maximice su productividad, es fundamental comprender con precisión los obstáculos para un mejor rendimiento. Es por ello que conocer los factores que perjudican la productividad debe ser una de las prioridades estratégicas de la gestión rural.
Al fin y al cabo, estamos hablando de un tipo de producto que depende de una serie de aspectos para funcionar.
Independientemente de tu tipo de cosecha, cuando hablamos de grandes cantidades, hay aspectos que no se pueden pasar por alto.
Es a la sombra de este tema que algunas prácticas cobran cada vez más protagonismo en el ámbito productivo agrícola: la silvicultura , por ejemplo. Es el proceso de producción, reproducción y cultivo de los bosques.
Sin embargo, antes de tomar cualquier acción, es necesario descubrir los principales factores negativos que pueden afectar la productividad agrícola. ¿Vamos allá?
Clima
El clima es de vital importancia en la productividad agrícola, ya que las temperaturas y el nivel de luminosidad son reflejo del clima y sus altibajos.
Además, esencialmente todos los otros factores que discutiremos a continuación están fuertemente influenciados por el clima.
Los picos (positivos o negativos) de temperatura, por ejemplo, pueden causar varios daños a la siembra, impidiendo que las plantas absorban los nutrientes del suelo.
Por supuesto, en este caso todo dependerá del tipo de plantación, pero lo ideal es que la temperatura se mantenga suave o acorde con la ubicación de la plantación.
Por ejemplo, las granjas ubicadas más arriba suelen ser más frescas y húmedas.
Por otro lado, las fincas en el Medio Oeste de Brasil, por ejemplo, sufren de luz solar constante y altas temperaturas.
Los cambios en este espectro pueden dañar las plantas, afectando los cultivos, sus resultados y, por supuesto, su productividad.
Además, el clima también contribuye a la incidencia de la luz sobre las plantas, característica imprescindible y muy controlada en algunos tipos de plantaciones.
El clima inestable puede generar períodos de tiempo nublado, lo que afecta la luminosidad del campo y puede afectar el crecimiento de varias plantas, como el maíz, por ejemplo.
Humedad
Que las plantas necesitan agua ya lo sabes. Sin embargo, esta relación debe estudiarse cuidadosamente para que su cultivo tenga el nivel de humedad adecuado.
Esto depende de una serie de estudios, en este caso, ¡el uso de técnicas forestales es muy interesante!
Su primer objetivo, sin embargo, debe ser evitar el déficit hídrico, para que la humedad sea una constante en los terrenos utilizados en las plantaciones.
El principal beneficio de la humedad es que ayuda a la planta a desarrollar raíces fuertes, capaces de absorber más y mejores nutrientes.
Sin embargo, fíjate bien: el exceso de humedad también puede “ahogar” las plantas y cambiar la química del suelo, lo que desequilibra tu cultivo.
En este caso, necesitas un estudio asertivo sobre la cantidad ideal de agua para abastecer toda tu plantación.
De esta forma, es posible crear un sistema de drenaje eficiente, así como saber en qué tecnologías de riego invertir.
En la práctica, existen diferentes tipos de tecnología de riego que puedes utilizar en tu cosecha, que actúan en superficie, con aspersión, sub-irrigación o de forma localizada en la plantación.
Fertilidad del suelo
El nivel de fertilidad del suelo es otro aspecto clave para mejorar la productividad agrícola. Cuanto mejor esté preparada la tierra, más fácil y valiosa será cultivarla.
Esto implica varias cuestiones, como, por ejemplo, el contenido de nutrientes del suelo.
Comprender el nivel equilibrado deseado es lo que permite que la tierra proporcione el crecimiento completo de su plantación.
Este es, de hecho, uno de los grandes problemas detrás del objetivo de aumentar la productividad agrícola.
Según un estudio publicado en un artículo del Instituto Federal do Tocantins , el 26% de los agricultores afirmó que sus suelos no son lo suficientemente fértiles para expandir su producción.
Por supuesto, el estudio se refiere a un entorno específico, pero ya da una idea de lo difícil que es tratar el tema.
Porque, al igual que el mantenimiento de la humedad, y de manera totalmente relacionada, la fertilidad del suelo depende de una alta competencia técnica.
En este punto, además de la experiencia de profesionales capacitados, es fundamental contar con tecnologías que simplifiquen la gestión rural y potencien su trabajo en el campo.
Plagas
Las plagas pueden acabar con toda su cosecha en cuestión de días. Por lo tanto, es necesario invertir en tácticas contra plagas e infestaciones para mantener y mejorar la productividad agrícola.
Sin embargo, no basta con invertir en plaguicidas, que son capaces de detener la infestación de plagas y el nacimiento de malas hierbas, entre otros, es necesario saber cómo aplicar estos productos.
El uso inadecuado de plaguicidas, por ejemplo, puede provocar enfermedades en su plantación.
En otras palabras, también es una práctica que requiere conocimientos técnicos e inversiones precisas para garantizar las mejores y más seguras cosechas.
Productividad agrícola: 5 consejos para aumentar la eficiencia
Pero ahora, pasemos a la parte práctica: ¿cómo aumentar la productividad agrícola en tu finca? Lo esencial es pensar en hacer las inversiones adecuadas.
Por eso, no existe una sola forma de estimular su productividad, sino una combinación de técnicas de gestión, tecnologías para la administración empresarial y diferentes modelos de negocios.
Pero y tú, ¿ya sabes qué caminos seguir? Te contamos 5 consejos esenciales para aumentar tu nivel de productividad agrícola. ¿Vamos allá?
Invertir en agricultura de precisión
La agricultura de precisión es básicamente el uso de datos e información precisos para influir en la toma de decisiones a fin de mejorar la productividad del campo y el rendimiento de la tierra.
Se trata de la unión del Big Data con la ganadería, con el uso de tecnologías innovadoras tanto aplicadas al campo como en la gestión del negocio.
Entre los principales ejemplos, citamos sistemas GPS, drones de monitoreo, equipos autónomos y sistemas de gestión de alta capacidad.
Además, entre otros beneficios, la agricultura de precisión es una táctica que reconoce que cada granja es diferente de la siguiente.
Es decir, cada terreno tiene sus propias características —así como cada negocio tiene sus particularidades— y todo eso hay que tenerlo en cuenta.
Por eso, el enfoque apunta a utilizar tecnologías para analizar los datos de cada finca y, así, desarrollar las mejores estrategias.
Pero, ¿cómo funciona la agricultura de precisión?
Pues con procesos que involucran la toma de datos, la planificación agrícola —desde una perspectiva administrativa y también productiva—, así como la aplicación y control de insumos en el campo.
Rotar cultivos
No es que la rotación de cultivos sea nueva, pero siempre debe usarse para mejorar la eficiencia de sus cultivos.
¿Sabes de qué se trata? Como su término lo indica, es la rotación de diferentes cultivos de plantas en la misma área de cosecha, durante un período determinado del año.
El objetivo es tanto aumentar los ingresos del negocio, como recuperar el suelo, evitando el desarrollo de plagas.
Con la rotación de cultivos, el agricultor evita el desarrollo de un monocultivo, que es capaz de degradar el área sembrada, tanto física como química y biológicamente.
De esta manera, el agricultor puede mejorar la productividad agrícola, ya que evita la propagación de malas hierbas y plagas.
Vale la pena mencionar: la rotación de cultivos no es algo precisamente simple de aplicar.
Es necesario un estudio profundo del área de plantación, así como una comprensión de su aptitud agrícola.
Con esto, es posible diseñar estrategias de rotación que reduzcan el agotamiento del suelo.
Esto sucede por varias razones, pero especialmente por la variación en los fertilizantes y nutrientes aplicados a la tierra.
Todo esto enriquece el área de siembra, haciendo que la tierra sea más resistente y productiva.
Usa un buen equipo
A través de la automatización agrícola, su agricultura se vuelve más precisa en las operaciones, así como más eficiente en los resultados en general.
Sin embargo, esto significa que debe utilizar el mejor equipo del mercado.
Por supuesto, sabemos que el factor “precio” influye demasiado en el caso de los micro y pequeños agricultores.
Es por eso que recomendamos mirar la rentabilidad del equipo que necesita comprar.
Además, recuerda que la productividad agrícola también dependerá de la agricultura de precisión.
Esto significa que no vale la pena invertir solo en tecnologías para el campo, sino también en sistemas de gestión que ayuden a centralizar los datos recopilados por sensores y drones de monitoreo.
Una buena noticia para los pequeños productores es que existen empresas que ofrecen soluciones adecuadas para los negocios más pequeños, lo que no los restringe en el mercado y no los convierte en “presa fácil” de los grandes de la agroindustria.
Aprende a usar correctamente los fertilizantes
Para asegurar el mejor nivel de productividad agrícola, es crucial que sepa cómo usar los fertilizantes correctamente.
¿Pero por qué? Pues la relación es la misma que deberías tener con los productos fitosanitarios.
Es decir, el uso no compensado puede perjudicar su suelo, que se caracteriza por su aplicación sucesiva o en una cantidad fija.
Te recomendamos realizar un estudio de cada cultivo y conocer en profundidad las necesidades nutricionales necesarias, para que puedas utilizar los fertilizantes en la cantidad adecuada.
La buena noticia es que estos estudios se pueden realizar en poco tiempo, lo que ayuda con su programa de siembra.
Contar con mano de obra calificada
Hoy en día, contar con mano de obra calificada en el campo es un desafío para la mayoría de los agricultores, sin importar el tamaño de la agroindustria.
Por eso debes replantear tu oferta de trabajo, con el fin de atraer trabajadores acordes con las tendencias tecnológicas que siempre invaden la finca.
Esta experiencia será esencial en momentos de necesidad y un problema del que su granja no puede distanciarse.
Otro punto que tu finca puede incentivar es la capacitación, ya que cada día que pasa se implementan nuevas técnicas y tecnologías en el campo, y tu negocio necesita adaptarse a esto para seguir siendo competitivo y productivo.
Transformación Digital en la Productividad Agropecuaria: ¿Qué es y cómo funciona?
Una de las grandes metas detrás de la transformación digital que se vive en el campo está relacionada con la productividad agrícola. Cada vez más, es necesario producir mejor y de forma más ágil.
Sin embargo, ¿cómo conciliar las exigencias de una base de consumidores que no deja de crecer, la necesidad de evolución que impone el mercado y las limitaciones ambientales?
Es un gran desafío, ¿no estás de acuerdo? Por eso, a día de hoy, movimientos como el de Agricultura 5.0 ya son una realidad
Es decir, una evolución del concepto Agricultura 4.0, que buscaba llevar tecnología y datos al campo. Con 5.0, el objetivo es conciliar todo esto con la demanda y la feroz competencia del mercado.
Por lo tanto, invertir en la transformación digital es una oportunidad para que el agricultor se ponga por delante de la competencia.
¿Me gusta? Apostar e invertir en soluciones innovadoras que amplíen tu visión de lo que sucede en el campo y fuera de él.
El objetivo es, por tanto, ampliar horizontes, añadiendo una visión holística de la gestión de las explotaciones.
Productividad agrícola: ¿Por qué invertir en tecnología?
Entre todo lo que has aprendido en esta completa guía, quizás la principal lección sea que, para desarrollar la productividad agrícola, es fundamental invertir en tecnología.
Las innovaciones están haciendo que el mercado sea cada vez más automatizado, autónomo y eficiente. Pero, por supuesto, en la práctica, ¡la tecnología puede agregar mucho más!
¿Qué quieres saber? Separamos los principales puntos positivos, échale un vistazo:
Control y optimización de procesos
Con un software de productor rural, es posible realizar varias tareas relacionadas con el control de procesos en su finca.
Uno de ellos es la administración de maquinaria, así como el uso de vehículos en el día a día.
De esta forma, es posible dictar el ritmo de la producción agrícola y potenciar sus procesos de siembra, cultivo y cosecha.
Otro punto que aporta un sistema de gestión agrícola es la optimización de procesos burocráticos como el plan de manejo.
Reducción de pérdidas
Un desempeño más efectivo, asertivo y basado en datos permite que todo, desde la estrategia hasta la operación, se lleve a cabo de una manera que mejore los resultados comerciales.
Este es un punto positivo, ya que reduce las pérdidas de cultivos, especialmente debido a eventos imprevistos como las plagas agrícolas.
Además, una gestión combinada con tecnología, utiliza varios sistemas para ayudarte en tu día a día.
Supervisión
Y dado que estamos hablando de agricultura de precisión, es fundamental utilizar la tecnología como un medio para mejorar sus métodos de seguimiento de cultivos.
Soluciones como la teledetección son esenciales en este punto, ya que aseguran que el agricultor recopile rápidamente todos los datos en un área determinada de la superficie terrestre, ¡utilizando drones!
Sustentabilidad
Finalmente, la tecnología que ayuda a la granja a lograr una métrica importante para el éxito hoy es la sostenibilidad.
Con soluciones de vanguardia incorporadas en campo y en la gestión del negocio, es posible realizar una gestión más sostenible e inteligente, valorizando tu producto, tu mano de obra y también tu tierra!
TOTVS Tecnologías para Agro
¡El principal y más completo portafolio de tecnologías para la gestión de agronegocios, con sistemas que mejoran la productividad agrícola, lo puedes encontrar en la familia de productos TOTVS Agro!
Utilizado por productores agrícolas de todos los tamaños, como, por ejemplo, por 8 de los 10 mayores grupos sucroenergéticos de Brasil, los sistemas TOTVS para Agro modernizan su gestión.
Así, te permite controlar todos los aspectos de la producción, teniendo acceso a datos valiosos y en tiempo real sobre tu productividad.
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Con los sistemas TOTVS, su agroindustria ahorra dinero, optimiza procesos y logra mejores indicadores de productividad agrícola.
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Conclusión
Trabajar en estrategias para incrementar la productividad agrícola es probablemente una de las prioridades de los productores rurales de hoy.
A lo largo de este contenido, te presentamos todo sobre el tema, profundizando en el concepto, cómo funciona, la importancia de invertir en productividad y cómo puede impactar en tu negocio.
Además, también hablamos de la relación intrínseca de la productividad con el uso de la tecnología, tanto en campo como en la administración de datos y procesos de gestión empresarial.
Por eso, sus inversiones deben estar bien medidas, ya que es importante modernizar y automatizar la gestión y, por supuesto, añadir soluciones innovadoras a la gestión de la empresa.
Y llegados a este punto, ya lo sabe: ¡solo cuente con una de las soluciones de la familia TOTVS Agro!
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