El mundo de los sistemas de información acuña un gran número de conceptos y aparecen otros tantos nuevos casi de forma diaria. De entre todos ellos, están cobrando especial relevancia las herramientas de Business Intelligence, directamente relacionadas con los datos que generan las empresas. Gracias a estas herramientas, las compañías pueden acceder rápidamente a ellos y así, posteriormente, evaluar la información y crear informes y análisis que ayuden a mejorar los procesos empresariales, así como a tomar decisiones que puedan ser positivas para el negocio.
Según el artículo History of Business Intelligence de Richard Miller, la primera mención al término Business Intelligence se encuentra en una enciclopedia publicada en EEUU en 1865, titulada Cyclopaedia of Commercial and Business Anecdotes. Pero no será hasta el siglo XX, con el avance de la tecnología y, en concreto, con el desarrollo de los almacenes informáticos de datos, cuando podemos empezar a hablar del concepto de inteligencia de negocio tal y como lo entendemos ahora.
Los sistemas BI se basan en la integración y universalización de la información, es decir, todas las áreas de la empresa proporcionan datos, y a su vez, se benefician de ellos teniendo acceso a cualquier tipo de datos que necesiten y les sea de utilidad, aunque la misma provenga de cualquier otro departamento. La finalidad de lo anterior es dar respuesta a las necesidades analíticas de la empresa, por lo que implementar un sistema BI requiere de un cuidadoso análisis y diseño.
El BI es utilizado por todo tipo de negocios, de todos los tamaños. Desde una pequeña tienda del sector retail hasta una multinacional dedicada a la industria tecnológica. Por ejemplo, las cadenas de restaurantes como Wendy’s y T.G.I. Friday’s usan BI para tomar decisiones estratégicas, como qué nuevos productos añadir al menú, qué platos quitar o qué locales deben cerrar, Walmart usa grandes cantidades de datos y análisis para dominar la industria, mientras que Amazon y Yahoo se basan en la inteligencia de negocios para llevar a cabo cambios comerciales.
El mercado de Big Data y Business Intelligence se mueve a gran velocidad. Según IDC, continuará creciendo y alcanzará los 260.000 millones de dólares en el año 2022, y prevé que hasta entonces el gasto en esta área se expandirá a una tasa promedio anual del 11,9%. El año 2019 promete mucho a las empresas que utilizan sistemas de BI para unificar sus datos, realizar análisis y dar movilidad a sus empleados con la inteligencia necesaria para poder tomar decisiones empresariales justificadas.
En el mundo empresarial, el número de datos recopilados, la cantidad de almacenamiento necesario para alojar dichos datos, la gestión de datos que se requiere para garantizar la fidelidad de los datos y el acceso a la nube necesario para movilizar a los trabajadores de hoy en día no paran de aumentar exponencialmente cada año.
Toda empresa que desee seguir en el mercado y creciendo, en un mundo cada vez más competitivo, deberá incorporar nuevos métodos para no quedarse atrás, saber con exactitud qué es lo que los clientes están buscando y poder brindárselo. La inteligencia de negocios es la solución a esto y miles de casos alrededor del mundo en las condiciones más diversas, así lo demuestran.
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