El uso de indicadores de desempeño es crucial para mantener la visibilidad de las operaciones de la empresa y promover las mejoras necesarias. Revisar procesos internos, identificar debilidades y buscar alternativas para optimizar el negocio son acciones que siempre merecen atención.
Para aprovechar al máximo las oportunidades que puedan surgir, hemos preparado este artículo, explicando cómo utilizar los indicadores de desempeño estratégicamente. ¡Sigue leyendo y compruébalo!
¿Qué son los indicadores de desempeño?
Los indicadores de desempeño, o indicadores de desempeño, sirven para medir la calidad de los procesos de una empresa de acuerdo a sus metas y objetivos. Es una forma de medir el rendimiento del equipo, así como de detectar posibles mejoras. El seguimiento de estos indicadores es fundamental para que la empresa vea dónde puede mejorar y así desarrollarse aún más. El uso de un sistema específico para soportar las rutinas de gestión,
por ejemplo, permite monitorear estas métricas en tiempo real. De esta manera, las decisiones serán más asertivas y estratégicas.
El uso estratégico de los indicadores de desempeño
La gestión empresarial se desarrolla en base a datos concretos y estadísticas de actividad, lo que hace que todo sea mucho más transparente y fiable. Este soporte informativo basado en datos se obtiene a través de indicadores de gestión y desempeño, los conocidos KPI (Key Performance Indicator).
Son responsables de brindar un análisis directo, preciso y visible a los gerentes, midiendo el desempeño de las actividades estratégicas del negocio, sus empleados y procesos.
En un contexto de alta competencia en el mercado, evaluar indicadores es una de las formas más inteligentes y confiables de identificar puntos de atención, además de cuellos de botella, errores, caída de productividad y otras variables que afectan el desempeño general de la empresa.
Los KPI son la base para el establecimiento y seguimiento de metas y objetivos. Esto se debe a que trabajan con datos y estadísticas concretas. De esta forma, garantizan la medición en las evaluaciones y permiten al gestor comparar el desempeño en períodos específicos y verificar la proximidad con las metas establecidas.
¿Cómo elegir los KPI’s?
Como se dijo, debe elegir los KPI correctos para su negocio. Las empresas minoristas, por ejemplo, suelen centrarse en las métricas de ventas, el costo de fabricación y su margen de beneficio.
Las empresas orientadas a los servicios a menudo se preocupan por los precios, la dotación de personal y el flujo de caja. A partir de estos datos, por ejemplo, una empresa puede revisar su política de precios, comparándola con la de sus competidores, para evaluar si está cobrando un precio competitivo por sus servicios.
Como regla general, para que los indicadores de desempeño contribuyan significativamente al control de la organización, es necesario desarrollar un plan estratégico en relación con el uso de cada KPI. Asimismo, es fundamental trabajar con objetivos claros a la hora de definir las metas que se deben alcanzar.
A partir de ahí, la definición y gestión de estas métricas puede centrarse en el seguimiento de la evolución de los resultados de la institución y de los empleados. De esta forma, sirven de base para la toma de decisiones y la creación de estrategias de mejora.
En este contexto, también cabe destacar la importancia de compatibilizar los indicadores con la realidad de la empresa. No tiene sentido fijar y definir KPI complejos si la empresa no tiene suficientes recursos internos para recopilar datos y analizarlos. Idealmente, las métricas deberían ser fáciles de entender y medir, cumpliendo con los objetivos de la organización.
Ejemplos de indicadores de rendimiento empresarial
Después de toda esta contextualización sobre los KPI’s, podemos mencionar cuatro tipos de indicadores de desempeño que se pueden analizar.
Capital humano
Por su relevancia para el éxito de la empresa, el capital humano debe ser clasificado como uno de los indicadores de desempeño organizacional. Después de todo, sin empleados, la empresa difícilmente puede lograr sus objetivos.
Para medir el valor del equipo de la empresa, es necesario dividir los costos totales del negocio -sin considerar la nómina- por el número total de empleados.
Productividad
La tasa de productividad, en el contexto de los servicios, juega un papel clave en los resultados financieros. Esto se debe a que cuanto más productivo es un equipo, más servicios se pueden brindar y más rentable será el período. De ahí la importancia de utilizar este indicador.
Esta métrica se puede vincular a los resultados de un equipo en relación con el tiempo dedicado a realizar el servicio. Lo ideal es siempre aumentar la producción sin que ello suponga un aumento del número de empleados y de la jornada laboral. Por ello, invertir en formación y recursos que optimicen las actividades puede ser el mejor camino.
Éxito de ventas
Este es un indicador muy eficiente en la gestión de costos del sector servicios, ya que ayuda a comprender los resultados de las negociaciones. El éxito de ventas se puede medir comparando la cantidad de contratos que se cerraron con la cantidad total de oportunidades generadas en un período determinado.
Por ejemplo, si se crearon diez oportunidades y ocho se convirtieron en servicios realmente prestados, hay una tasa de éxito de ventas del 80 %.
Margen de contribución
Este es un indicador de desempeño financiero que se refiere a los ingresos del negocio después de deducir el monto relacionado con los costos y gastos variables. Sólo después de este cálculo existe la posibilidad de evaluar si el desempeño de la empresa está dentro de las proyecciones.
El seguimiento del margen de contribución brinda una visión más precisa de la empresa. El análisis puro y simple de la facturación no proporciona los parámetros para considerar los resultados como satisfactorios o no. Esto se debe a que solo indica los valores que se generaron con la venta de servicios, pero no demuestra los gastos necesarios para mantener la operación en marcha.
Tecnología para el seguimiento de indicadores
Finalmente, los indicadores de desempeño empresarial emergen como herramientas esenciales para la gestión en el sector servicios. Además de mejorar la visibilidad en los procesos, son la base para la reducción de costos y para la identificación de debilidades en el negocio, brindando una guía para adoptar más optimizaciones estratégicas. Sin embargo, es necesario recalcar la importancia de establecer un seguimiento activo. Esto ciertamente se puede hacer con base en el uso de tecnología y sistemas de gestión diseñados para este propósito. Para saber más, vea cómo funciona un sistema de gestión y descubra las ventajas de adoptarlo en su empresa.
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